CBS despide al locutor que insultó a jugadoras negras de equipo de baloncesto

Por sus comentarios racistas o por intolerancia de ambas partes, pero lo cierto es que se va con sus bártulos a su casa y quien sabe si encontrará otra emisora en que desparramar sus porquerías por el orificio con que come.

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New york.- CBS despidió al locutor de radio Don Imus tras una semana de intensa polémica por los insultos vertidos por el periodista contra las jugadoras de un equipo femenino de baloncesto de mayoría afroamericana.

La decisión de CBS se produce un día después de que el canal de televisión por cable MSNBC decidiera dejar de transmitir el programa radiofónico, y de que varias grandes empresas anunciaran que retirarían su publicidad del espacio, entre ellas American Express, Procter & Gamble y General Motors.

La pasada semana, en una emisión del espacio "Imus in the Morning", el controvertido locutor utilizó la expresión "nappy-headed ho's" -que podía traducirse como "putas de pelo rizado y espeso"- para aludir a las componentes del equipo de la Universidad de Rutgers, en el estado de Nueva Jersey, la mayor parte de las cuales son afroamericanas.

Estas afirmaciones expresadas en el programa de radio, que realizaba en la emisora WFAN-AM en Nueva York, propiedad de la cadena CBS y se emitía simultáneamente por MSNBC, desató una intensa oleada de protestas.

El locutor pidió perdón en reiteradas ocasiones en los últimos días por los términos racistas y sexistas que empleó. Numerosos activistas de la comunidad afroamericana reclamaron su despido, que se ha producido hoy.

El presidente y consejero delegado de CBS, Leslie Moonves, reconoció que en la decisión de la empresa había pesado el efecto que las palabras de Imus han podido tener "en las jóvenes de color que están tratando de abrirse un camino en esta sociedad".

Imus, quien durante su carrera llegó a calificar al ex secretario de Estado Colin Powell de "comadreja resoplante" y al gobernador de Nuevo México de "mariquita gordo".

Asimismo dirigió en alguna ocasión sus dardos a periodistas afroamericanos como a Gwen Ilfill, que cubría la información de la Casa Blanca para el New York Times, o contra William Rhoden, de la misma publicación.

El despido de Imus no supone solo la caída de uno de los locutores más importante e influyentes del país, sino que supondrá un golpe económico para CBS que ingresaba con su programa unos 15 millones de dólares anuales, según medios financieros.